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Actualmente en la industria automotriz, a la rentabilidad y eficiencia, como objetivos principales del sector, se le suma el compromiso medio ambiental. Esto, porque se ha transformado en una demanda social que atraviesa a todos los sectores económicos, pero también porque de otra forma es imposible seguir operando.
Entre otras cosas, hoy los esfuerzos de la industria están centrados en reducir las emisiones contaminantes de los automóviles, a través de la implementación de diferentes herramientas y así poder cumplir con los compromisos adquiridos y las normativas que en Europa, hoy regulan los límites aceptables para la emisión de gases de combustión interna de los vehículos. Sin embargo, Chile se ha sumado a estos compromisos y desde el 30 de septiembre del 2020 es el primer país en Sudamérica en aplicar la norma de emisiones Euro 6.
La normativa europea sobre emisiones reúne un conjunto de restricciones, que se van actualizando a medida que el medio ambiente lo va necesitando, y que buscan cumplir con el objetivo de la Comisión Europea de reducir los gases de efecto invernadero en un 80% para el 2050. Esto quiere decir que, si los automóviles nuevos no cumplen con los requisitos, no podrán venderse en ninguno de los países miembros de la comunidad. Ahora bien, esto no excluye a países como Chile, que durante varios años ha decidido aplicar las normativas (Euro 4 y 5) en nuestro país.
La actualización en las normas de emisión no es una novedad en nuestro país. Esta es la segunda vez que Chile realiza dicha actualización, alineándose con los estándares aplicados en países de la Unión Europea y también Estados Unidos, Canadá, Australia, Japón y Corea. Sin embargo, en nuestro país, esta implementación será en dos fases. Primero, con la norma Euro 6b dirigida a vehículos livianos y medianos, y luego se avanzará con la norma Euro 6c, la más exigente y que requiere mejorar la calidad de los combustibles para su implementación.
Ahora bien ¿cuáles son las diferencias de esta nueva normativa con la que se venía operando? Principalmente la Euro 6b tiene como objetivo reducir en un 56% las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOX) y de material particulado (PM). Además de esto, se establece un procedimiento de pruebas más exigentes para los vehículos.
No cabe duda que Chile es un país líder en la región en cuanto al compromiso de una movilidad verde. Por lo mismo, antes de que se adoptara la nueva normativa, ya se habían implementado modelos de vehículos SUV y comerciales con motores de tecnología Euro 6. Habrá que estar atentos para ver todas las nuevas homologaciones en los modelos que lleguen al país dentro del año que viene, para poder estar a la vanguardia de una movilidad verde, limpia y responsable.
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